Se hunde la tarde en su espesura de golondrinas, tristes, esta tarde de cielo gris y niebla densa, el roce de tus ojos me llegó al alma haciéndome estremecer y haciendome a lado de tus locuras repentinas, tu deseo es una estrella junto a la luna, tu voz estalla dentro de mi cada vez que dices mi nombre, me haces tuya con tus miradas, en medio del todo me haces temblar cuando preguntas por que te miro de esa forma en que te miro, exploro cada una de tus muecas, me escondo en cada rincón que he recorrido y quiero recorrer, me sumerjo en los poros de tu piel divina, y junto a ti pasarme la vida dormirme a tu lado, pero esta noche estoy aquí extrañándote queriendo estar justo en tu regazo, justo abrazada a tu espalda, amándote dormirme mientras te miro, despertar y saber que estas, que con solo abrazarte abrirás los ojos para mirarme con ternura, y darme ese beso que me lleva al espacio, en el preciso momento cuando me rozan tus ojos y pestañas.
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